Si se pudiera definir en forma simple y sencilla la causa común de cualquier conflicto, ¿cuál sería la misma? Más allá del caso de nuestros hermanos del Medio Oriente que no dejan de apedrearse, la pregunta es: ¿Qué elemento esencial tienen en común todos los conflictos en los que el ser humano es protagonista?
A mi manera de ver, en el plano material, la causa común es la escasez de recursos considerados como buenos por, al menos, dos partes. Así, el conflicto sobreviene cuando un bien de por sí escaso es anhelado por dos partes interesadas en el mismo. Esto se aplica a todos los casos de conflictos en los que intervienen seres humanos. Desde dos amigos, un matrimonio y dos compañeros de trabajo, hasta países y gobiernos de todo el planeta. Siempre, las partes se disputan un bien que es escaso, el cual supuestamente no alcanza para ambas partes. Dos amigos que pelean por una misma novia (porque ella no puede ser plenamente novia de ambos al mismo tiempo), un matrimonio que pelea por tener razón (porque viven en la creencia de que dos personas no pueden tener razón al mismo tiempo), dos compañeros de trabajo que disputan el reconocimiento único de sus superiores (porque sus superiores les han enseñado, como les enseñamos a los alumnos en nuestras escuelas, que dos personas no pueden ser igualmente reconocidas, sino que siempre tiene que haber una superior y otra inferior). También, otro caso se presenta en la disputa de dos gobiernos cuya «tierra prometida» no alcanza para ambos. Israel y Palestina, pobrecitas, conducidas por ciegos que conducen a otros ciegos, anhelan solo para ellas la tierra prometida y… no alcanza para ambas. En síntesis, la clave y la esencia de todo conflicto es la escasez, dado que si ambas partes en conflicto anhelaran un bien, no siendo el mismo escazo, no habría conflicto.
Pero hay otro plano en todo conflicto, superior al plano material en el cual se manifiesta inicialemente. Este otro plano es el que verdaderamente alimenta, sustenta y hace prosperar el conflicto. Todo conflicto, entonces, se manifiesta en un plano material pero se sustenta en un plano espiritual. De ahora en más, luego de conocer estas verdades, no podremos decir que un conflicto se presenta «solamente» en el plano material, sino que «también» se sustenta en un plano espiritual. ¿Qué puede haber o no haber en el plano espiritual que sustente el conflicto? El amor por el prójimo, es decir, considerar si las partes en conflicto se aman o no. El amor, por supuesto, entendido aquí no sexual ni materialmente, sino espiritualmente, como la búsqueda incondicional y desinteresada del bien para el otro, por el prójimo. Y aquí, creo yo, está la clave última y esencial de todo conflicto. Puede haber escasez en el plano material, pero si hay verdadero amor espiritual entre las partes, el conflicto no podrá prosperar. Si no hay amor, en cambio, todo conflicto es posible dado que vivimos en un mundo finito y limitado, repleto de escasez.
Así, las partes en todo conflicto no están en conflicto por la escasez material en sí misma sino porque no se aman o porque no saben amarse; no buscan en forma indiferentemente y desinteresada el bien del otro sino el propio. Quieren el bien para ellos solos, cada uno por su lado. Van contentos y motivados a la batalla con un grito de guerra que dice: «¡Por mi y nada más que por mí!». Por supuesto, el otro bando hace lo mismo, y así estamos. Cristo (¡cuánto se lo escucha y se lo cita, pero que tan poco caso se le hace!) dijo: «Amense los unos a los otros como yo los he amado». Es tan sencillo y tan complejo a la vez. ¿O nosotros lo hacemos complejo?
Finalmente entonces, en todo conflicto no importa tanto el bien escaso de que se trate sino del amor que se profesen las partes en conflicto. Por ello no habría que preguntarles a los israelíes y a los palestinos por qué se pelean sino por qué no se aman, pues amándose podrán resolver la escasez material; sin amarse nunca podrán resolver nada, como de hecho sucede. Es menester reflexionar sobre esto en nuestros conflictos cotidianos, con las personas que nos rodean, y centrarnos siempre en el amor al prójimo más que en la escasez de bienes que en este mundo material y finito son y serán moneda corriente.
Recordemos que a veces no amamos al prójimo no porque verdaderamente no lo amemos, sino porque no sabemos amar. ¿Y si aprendemos a amar en vez de vivir en conflicto? ¿No sería ese un extraordinario desafío para plantearnos a nosotros mismos y a nuestras familias?
Por Hugo Landolfi
PD: Espero con ansias sus comentarios.
muy de acuerdo con su planteamiento, sólo le falto citar que a los seres humanos de ésta era, nos cuesta mucho DESPRENDERNOS DEL EGO, ese que causa tanto daño…cuando no hemos abierto la CONCIENCIA que no lleva y nos muestra la LUZ, y que nos lleva a todo entendimiento…acpetar,ceder, otorgar,conciliar,dialogar poniendo por OBRA el mandamiento del Señor Jesús amar al prójimo como a si mismo, creo que esa es la CLAVE, pero no podemos lograr entenderlo.
que la LUZ los guíe a la PAZ.
Buen punto el de la escazes y el amor. Claro , todo conflicto es de orígen multifactorial. Siempre he dicho que la mayoría de los problemas de la humanidad y de las sociedades en general, comenzando por la familia; son problemas de COMUNICACION. Si existiese una comunicación asertiva entre los seres ; es decir, de búsqueda de soluciónes y fundamentada en la buena fé (amor), pués no harían falta tribunales, abogados, ni siquiera justicia de paz y mediaciónes para la resolución de conflictos. Lo peor que le puede suceder a alguien es tener o asumir una actitud litigiosa ante cualquier cosa. No se puede andar por la vida exigiendo elementos probatotios ante los demás de lo que se nos ocurra. Por cierto, tampoco harían falta sicólogos clinicos, porque la mayoría de las consultas al profesional no lo son por patologias, sino por problemas o sesgos de comunicación. Habría que trabajar arduamente en la aplicación de una herramienta de mejoramiento de la comunicación entre los seres basada en principios eticos como la transparencia , la honestidad, donde no haya ganadores y perdedores , la buena fé, la proactividad para el logro de resultados . Vale
Pequeña errata
No es protatorios sino probatorios. Rectifico prosodia de las ultimas 3 líneas:
y, basada igualmente, en la buena fé y la proactividad para el logro de resultados edificantes. Vale
Comparto ampliamente sus conceptos sobre los conflictos en general, sobre el conflicto armado entre Israel y Palestina, merece un análisis mas profundo dado la complejidad de factores q intervienen, a mi modesto entender el religioso es el mas profundo, como ya sabemos milenario.
El principal factor q enuncia en su concepto “intereses materiales u económicos”, se presenta aquí en el conflicto, con dos actores principales EE UU e Israel, el primer estado saca réditos económicos (los mayores capitales Judíos están depositados en el país del norte), con su apoyo incondicional sobre las acciones belicosas de Israel sobre el estado Palestino, incluso con otros estados en conflicto con los Judíos
En mi poco conocimiento, el actual conflicto en curso, la franja de Hamas los palestinos presentarían un grave problema interno, con la imposibilidad de controlar los grupos insurgentes más radicales, no es muy comprensiva la actitud de lanzar misiles al estado de Israel, principal causa y justificación de los judíos para atacar a la franja de Hamas.
Es una guerra muy despareja, un estado con uno de los mejores Ejércitos del mundo Israel y su oponente grupo de palestinos desorganizados con la única opción de lanzar misiles al país enemigo.
Detrás de toda esta contienda, intereses extranjeros están en juego y actúan directamente en forma indirecta, EEUU como principal actor, el resto de la comunidad mundial trata de frenar terminar con el conflicto, a través de La ONU pero el país del norte no se los permitirá hasta tanto Israel NO CONSIGA SUS PROPOSITOS.
Para su información e ilustración pongo a su conocimiento, antecedentes del añejo conflicto palestinos y judíos para entender un poco más este grave conflicto.
http://es.wikipedia.org/wiki/Plan_de_la_ONU_para_la_partici%C3%B3n_de_Palestina_de_1947
http://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_%C3%A1rabe-israel%C3%AD_de_1948
Mis saludos y respetos.
En el extremismos y fundamentalismo, no puede haber amor. Estos pueblos, tienen estas características desde su nacimiento. Estas gentes tienen muy arraigada su religión y una cultura belicosa. Están acostumbrados a defender, como dice Hugo, lo poco que tienen como sea. Hay que tener en cuenta que en un territorio árabe con costumbres milenarias, existe una nación, (Israel), que es una «delegación» de occidente, o más bien de Estados Unidos. Imaginen que pasaría si en ves de instalar a Israel en tierra palestina, lo hubieran hecho en tierra canadiense o estado unidense o si quieren, pakistaní, o también aqui al sur de Argentina. Esa tierra donde ahora están es para ambos pueblos en litigio, sagrada, por lo tanto, y teniendo en cuenta las culturas de ambos pueblos, siempre habrá conflicto. La falta de comunicación y también la falta de cultura, hacen que las gentes de ambos pueblos sean manejados por sus líderes, (legítimos o no). Piensen en Hitler, Stalin, Castro, todos líderes de pueblos sometidos por su falta de intelecto, a cambio de ser apasionados y sin uso de la razón. Gracias.
Lo felicito Don Hugo, por el tema indudablemente un problema milenario, que se viene arrastrando generación tras generación. Dos temas centrales la escasez y el amor, y es lo cierto sino miremos como nuestros ancestros se formaron y la cultura que nos han legado. Pero qué podemos hacer en este siglo xxi ?, el siglo del cerebro, seremos capaces de revertir tales comportamientos?.El amor , el manejo del computador cósmico, es un tema que tiene que ser tratado con urgencia implementado y desarrollado en las curricula escolar a lo largo y ancho de éste mundo plano.Asi mismo en vez de hablar de escasez deberíamos hablar de la abundancia que existe en este precioso mundo que nos ha dado Dios.Temas profundos del plano espiritual, que superficialmente lo estoy pasando a éste mundo material. Bueno con las disculpas del caso es mi opinión personal. Un abrazo desde Huamachuco-Perú.
¡Buen tema! don Hugo. Y la respuesta es fenómena pero, como los libros de autoayuda, el asunto es ¿cómo se hace para que incorporemos a nuestro espíritu el «amaos los unos a los otros»? Porque el mandato cristiano es indiscutible, y aceptado, tiene dos posibilidades: 1) «siento que es así y actúo en consecuencia» y 2) «creo que es así e intentaré sentirlo para actuar en consecuencia». Y estamos en este segundo caso. Porque las ideas cristianas (y las de cualquier religión) constituyen por sí mismas un libro de autoayuda. Pero siempre el gran asunto es cómo hacemos para incorporarlas a nuestro espíritu.
Mi íntima convicción es que el hombre es bueno, en el fondo. Esa bondad se tapa con las construcciones de su pensamiento y el enfrentamiento pensamiento-sentimiento. pero en el fondo es bueno (para decirlo en fácil). Las ideas sobre las causas son conocidas y se pueden hacer diagnósticos extraordiamente acertados. Para cambiar un sentimiento ¿basta la teoría del cómo y por qué?
Sin duda, insistiendo mucho y desde chiquito, es mucho mejor que enterándose de las causas de grandulón. Porque cuando uno acuerda con la teoría y falla en la corrección, viene la culpa, y los psicólogos viven de ella; como los traficantes de armas de las guerras.
Entonces el gran asunto no es cómo o por qué es el cascabel del gato sino cómo se hace para ponérselo.
Creo que la casi única manera es la introspección en todas sus formas. El mismo JC se retiró 30 días al monte, antes de comenzar su vida pública. Lamentablemente en le cristianismo, el cuentito de lo que ocurrió en esos días es demasiado simbólico. Lamentablemente nuestra manera de vivir y de pensar, tan cartesiana, nos impide avivarnos. Y ya van dos fuertes «lamentablemente». Como decía un profesor de mi último año de Clínica: «…y, muchacos, recuerden siempre que el hombre ¡es humano!»
Me pareció interesante el planteamiento del artículo. Pero yo me pregunto, sera que existen bienes realmente escasos o nuestra ambición los hace escasos? La ambición del hombre es lo que lo lleva a su propia destrucción. El universo es perfecto, tenemos alrededor todo lo que necesitamos para vivir, pero es la ambición y avaricia, la que no permite que los bienes se distribuyan de manera equitativa. Muchos de los conflictos entre humanos se dan por la ambición, avaricia, el deseo de Poder, estos sentimientos endurecen los corazones, nos dejan ciegos, bloquean nuestra conexión con la esencia de nuestro ser, es así como llegamos a vivir en un mundo tan desarmonioso.
Para dejar que el amor fluya entre los humanos debemos aplacar esos sentimientos que bloquean el amor. Podemos empezar con los 7 pecados capitales (Envidia, Avaricia, Soberbia, Ira, Pereza, Gula, Lujuria). Todos tenemos algún grado de estos sentimientos, que nos llevan a tanta desarmonía, el cambio esta en nuestras manos, cuando uno mejora, lo que está a nuestro alrededor mejora.
Hugo gracias por plantear este tema, muy interesante. estoy de acuerdo con tu punto de vista pero agregaria algo más, el MIEDO (una manifestación del EGO). Veo muchas cosas que pasan en este mundo y me da bronca, disfruto de la ceación de otros, disfruto de la perfección de la naturaleza y me pone loca la estupidez humana.Hay un puñado de personas, mentes brillantes que construyen, pero desgraciadamente la mayoría destruye. destruimos porque tenemos miedo. Creo que no hay nada más destructivo que la inteligencia humana con miedo, pensar que el miedo es un mecanismo de defensa lógico para evitar que nos hagamos daño, pero si vamos a un nivel más profundo, el miedo nos paraliza, da lugar a que no nos comuniquemos, da lugar a que no accionemos a tiempo, da lugar a no exponernos, a que otros nos interprete a su manera, nos incomunica, da lugar a que en este bendito planeta haya guerras, hambre, egoismo, separación, envidia, muertes, etc. Imaginemos si el miedo no existiera por 48 hs…seria extraordinario..me imagino familias unidas, porque no habría miedo al rechazo, no tendríamos miedo a decir lo que sentimos realmente (nos comunicaríamos) seriamos capaces de abrazar a nuestros padres y decirles lo agradecidos que estamos de habernos dado la posibilidad de existir, asi como también decirles lo que nos hirió, de esta forma estaríamos «limpios», sin rencores, dispuestos a volver a empezar, sin resentimientos, no habría discordia, hablariamos y nos expresariamos sin miedo. Dariamos sin esperar nada a cambio, porque no tendríamos miedo a no tener, a que se acabe lo que tenemos, seriamos generosos, abiertos, alegres, no habria guerras porque no tendríamos miedo a perder ..etc.
No digo que el miedo no debería existir!!..pero falta realmente una inmensa cuotade valor en el hombre para darse cuenta que VENCIENDO los miedos el mundo puede estar realmente mejor.
Que tengan una excelente semana. Cecilia.
buenas
yo creo que todo comflicto parte de un desacuerdo por alguan de las dos partes,pero es bueno saber si esas dos personas se aman eso es muy cierto
pero cunado un comflicto es personal por un odio personal o un trauma
me refiero a uno de los casos de la segunda guerra mundial
la esterminacion de algunos judios 8000 por parte de ADOLFO HITLER se dice que su abuela engaño asu abuelo con judio y que los judios como religion y comerciantes tenian gran influencia.
talvez ese rencor impulso a este tirano a actuar contra los judios.
porque creer que lograra una raza pura es imposible tendria que acavar con casi todo el planeta.
por eso en un comflicto siempre abra un tirano o un errado,
y respecto el ataque israel a palestina me parese un exeso de fuersa palestina
nunca podra combatir con israel de igual potencial armamentista si nisiquiera posee una fuerza aerea. pero se dira que defiende a su pueblo de barios ataques palestinos, eso es muy cierto tenemos que defendernos pero a tal grado.
por otro lado tambien se puede creer que palestina se sacrifica como un martil para que otros pueblos se armen contra israel,
por que hay un punto interesante a palestina se le pidio no atacar israel para no desatar la furia de este, pero no le importo la desigualdad de armas y ataco
sera que espera que otros pueblos intercedan viendose como martires,
y respecto a la problematica de cual quier conflicto siempre abra
UN BILLANO O HERRADO DE CUALQUIER DE LOS LADOS
GRASIAS
Es bien cierto lo que dices, que en este conflicto, como en cualquier conflicto personal, el amor es la clave para la solución, pues el amor lleva en si sacrificio,es decir el darle lugar a la otra parte en cuestión. También noto que la practica del amor es mas fáctible entre personas que entre grupos humanos o naciones, pero es evidente la falta de un «amor al projimo» por ambas partes de este triste conflicto. Le dejo un pasaje del libro de Santiago, en la Biblia la cual el autor identifica la fuente principal de conflictos. «¿De donde vienen la guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, la cuales combaten en vuestros miembros?». Que sea un aporte mas a la discución
Bueno, muchas gracias a todos por sus comentarios y por leerme.
Mary Lou, tienes toda la razón en mencionar el tema del ego. El ego, entendido este como «lo que creemos que somos» vive en un mundo permanente de escasez y de violencia.
Antonio Corredor, tu comentario no podía hacer sido más certero. La comunicación interpersonal es clave, especialmente para decirnos que nos queremos y que nos amamos. Es curioso que la mayoría de las personas están imposiblitadas de decir a sus seres amados que los aman. ¡Cuánto más imposiblitados estarán de hacerlo con aquellos que no conviven diariamente con estas personas!
Jesus Saul Riquelme, como tu dices, la génesis «histórica» del conflico es larga, tan larga como la de Caín y Abel. La génesis filosófica, sin embargo, renace cada día.
Aldo Maza, podría haber amor en el fundamentalismo y de hecho lo hay. Lo que sudece es que es un amor mal entendido ya que no es «indiferente y desinteresado» sino todo lo contrario.
Lorenzo Armas, gracias por sus palabras. Es cierto lo que usted dice. Estamos tan avanzados en algunas áreas y tan en pañales en otras.
Sigo en el comentario que sigue.
Hugo
Juan M, tienes toda la razón, pero no son los libros la cuestión sino uno mismo. Aprendemos cosas con la mente, pero nuestro modo de obrar no refleja necesariamente lo que sabemos mentalmente. Leemos libros con nos dan ideas estupendas, pero no cambiamos, no logramos cambiar.
¿Por qué habríamos de cambiar, si lo único que quiere el ser humano es mantener el status quo, su estado actual. El cambio requiere un compromiso constante y de por vida de perfeccionamiento en el área intelectual, pero especialmente en la espiritual. Sanar al ego para luego trascenderlo, he ahí la clave del cambio. ¿Por qué no cambiamos? Porque nos identificamos con el ego, con lo que creemos que somos.
Vero A, interesante pregunta que dá justo en el clavo. La escasez es una cuestión más relacionada con nuestro estado de conciencia que con la disponibilidad o no de bienes materiales. Voy al mercado -dice el dicho- para ver cuantas cosas hay que no necesito.
Cecilia Vicente, gracias por a vos por leerme y comentar. Tienes toda la razón: el miedo es una de las caras del ego y, ¿quien puede ser libre cuando tiene miedo? ¿Somos lo que el ego dice que somos? ¿Es temible lo que el ego dice que debemos temer?
Juan Carlos Muñoz, el desacuerdo puede existir, pero lo que hace crecer el conflicto no es el desacuerdo sino la falta de amor. Metafóricamente, si el desacuerdo fuera la leña de un fogón, la falta de amor es la mecha que lo enciende y lo hace permanecer.
Gracias Leonel, muy atinado el aporte del texto de Santiago.
Hugo Landolfi
Estimado Hugo: Es sencilla la frase «ámense los unos a los otros» pero qué difícil es saber hacerlo. A veces la simple palabra «amor» es motivo de conflicto.
«¿Cuánto y cómo me amas?» «¿me amas tanto como yo a ti?» «Espero ser amado tanto y como yo te amo»
Somos seres humanos capaces de generar de cualquier asunto un conflicto.
Agregaría a la propuesta de amar una más: respetar.
Amémonos pero también respetémonos.
Gracias, Hugo.
Para mí la clave de todo conflicto se sustenta en el miedo. Miedo a no tener la razón, a perder mis razones, a no ser lo que aparento ser. La liberación del miedo a perder algo, lo que sea, eliminaría de un plumazo todos los conflictos, ya que es esta emoción la que nos hace pensar que tenemos que defendernos de algo. Creemos que poseemos, que somos dueños, que tenemos, y la defensa de estas posesiones y dominios, que sentimos atacados, no hace crear o participar en los conflictos. Sin posesiones no hay nada que defender y el miedo a perder desaparece, puesto que no hay nada que pueda ser atacado o perdido. Nada poseo, nada tengo, nada temo. Todas las guerras colectivas ó individuales de nuestra historia se sustentan en el miedo a perder algo que creemos poseer. Todas las guerras se sutentan en irrealidades, puesto que nada poseemos, nada es nuestro; y si nada es nuestro nada puede ser atacado, por tanto nada tengo que temer. Al final luchamos por algo que no existe. ¿Qué es el miedo? el miedo es una ausencia de amor, entendido el amor en la forma en que lo expresa Hugo en su reflexión. Si donde sentimos miedo ponemos amor, el miedo desaparecerá y con él todos los conflictos y las guerras. Si comprendemos que nada es nuestro, nada tenemos que defender de nadie. Esta comprensión supone un salto en la conciencia del hombre, pero un salto cuantico, bestial, el mirar nuestra razón de ser en este mundo fuera del concepto de peretenencia. Estamos locos cuando creemos que tenemos algo, que algo es nuestro. Nacemos, trabajamos y morimos sumergidos en la idea de adquirir posesiones para luego sentir miedo a perderlas y buscar la manera de fedenderlas. Sencillamente demencial. Nada nos pertenece, no necesitamos defendernos de nada, el miedo no tiene cabida. Podemos nacer con la idea de colaborar mutuamente en cuidar lo que nos rodea y nos sustenta, en crear nuevas cosas que nos hagan la vida más bella y agradable, no olvidemos que somos seres creativos, todos juntos, por que nada es mío o tuyo, todo (la tierra, los frutos de la tierra, el espacio, el mar, etc.) es un medio para nuestro crecimiento. De nosotros depende utilizarlo para ser felices y tener abundancia, o utilizarlo para pasarnos la vida defendiendo un pedazo de ese todo, cuando en realidad podemos tenerlo todo y disfrutarlo todo.
Realmente dio en el clavo……, es justamente la falta de amor la conciencia de amar, los valores y en si todo el aprendizaje y la interiorización de comprender entender y el «hacer lo justo….las cosas bien «, de tratar de vivir en armonía de gozar el hecho de estar vivos , disfrutando la vida, desde la prespectiva del respeto a la misma vida , respeto a uno mismo , respeto al prójimo , respeto a la naturaleza , a la vida, al mundo…….Orar sin desanimarse y aprender a vivir cada día más , aprender a amarla a valorarla , se trata de mejorar la cultura, en todos los pueblos del mundo ……ayudemonos, y ayudemos .Gracias profesor Landolfi, con su linea de amor , justicia y vida…..cuídese
Sobre el “conflicto” Árabe Israelí.-
Interesantes, aunque un poco desubicados los conceptos de este tema tan «explosivo» para la humanidad.
Sin embargo, no se puede reducir tamaño problema a «la falta de amor al prójimo» (o su escases), ni a la ausencia de entendimiento entre las partes (o su fundamentalismo), del mismo modo, como lo pretenden hacer aparecer las versiones maniqueas, que el conflicto de la Segunda Guerra Mundial no se puede reducir a las diferencias que hubieron entre el Nazismo y el Judaísmo (Alemanes contra Judíos).
Toda guerra, en cualesquier sentido y definición, no es más que la transición de la fuerza de la política a la política de la fuerza, y esta solamente sucede cuando las contradicciones SOCIALES y los INTERESES ECONOMICOS chocan, generalmente de una clase social contra otra, y casi siempre disfrazada de vulgar nacionalismo, o de racismo, o fundamentalismo religioso, o Anti terrorismo, etc.
En los casos de la 1ª y 2ª guerras mundiales, fueron los intereses de los países mas “desarrollados” (Comercial, industrial o militarmente), y que tenían necesidad de expandirse y dominar los territorios y los mercados fuera de sus fronteras, los que los llevaron a la confrontación bélica, y donde el vencedor destruye la economía del perdedor, y luego le impone cuotas y saldos totales de la reconstrucción de ambos, pero con el dominio completo del triunfador.
Cuando los conflictos no se expanden “mundialmente”, es porque los Estados Imperialistas solo necesitan mantener el flujo mercantil de su armamentismo y la dominación y control de los recursos energéticos no renovables (principalmente el petróleo) a niveles regionales, tal y como ha venido sucediendo en los conflictos del bloque Occidental (USA, ENGLAND, GERMANY, FRANCIA, ITALIA, principalmente) contra los países latinos, árabes, orientales y asiáticos.
Aquí es donde caben las viejas y las últimas declaraciones guerreras unilaterales encabezadas por el Tío Sam contra Irán, contra Irak, contra Afganistán, contra Palestina, etc. y donde sus intereses son muy específicos y materiales, y solo utilizan el velo de los “fundamentalismos” o del “terrorismo”, para intentar justificar su irracional violencia y su siempre desmedida (in) discriminación contra los pueblos victimados.
El actual conflicto Árabe-Israelí deja entonces de ser, en el fondo, la supuesta “guerra santa” entre dos bandos intolerantes fundamentalistas religiosos, y se convierte, realmente, en lo que ha sido siempre: La guerra de los intereses fundamentales del Capitalismo Internacional contra los pueblos y naciones que se oponen a su dominación, y que no casualmente, siempre son los del tercer mundo, desde la propia América latina, hasta el medio y lejano oriente, Asia y algunos países de Europa.
Buena Maestro.
Otros aspectos internos deben analizarse, por ejemplo como la falta de consideracion, Pero creo que esto se produce por la seguedad de la que usted habla. En realidad estas personas no defienden sus ideales sino mas bien los ideales de sus muy malos lideres. Eso digo Yo, igual No se nada de nada.